sábado, 20 de febrero de 2010

Polìtica, Economía y Educación




Polìtica, Economía y Educación

Hablar de la relación entre la política la economía y la educación es menester de los educadores. Los docentes debemos abocarnos a buscar estas respuestas tanto desde una macro-perspectiva, mirando desde el aspecto jurídico o filosófico hasta desde una micro-perspectiva, de mirar a cada estudiante y entender sus necesidades particulares. Haciendo una analogía es como hablar de economía y sociedad.
Históricamente el hombre se ha esforzado por saber, por conocer, por aprender, es por esto que desde las antiguas civilizaciones hasta nuestros días la evolución educativa es innegable siendo esto apoyado por la constante búsqueda de información y los cambios sociales sustentados en muchos casos por amplios proyectos políticos.
La educación no es un hecho fortuito ni aislado, su desarrollo, evolución y garantía de calidad deben ir apoyados por claros controles por parte de los gobiernos e incluso yendo más allá por organismos como la UNESCO dependiente de la Organización de Naciones Unidas que se encargan de que en los países miembros hayan proyectos educativos de calidad tanto desde el punto de vista filosófico hasta el administrativo logrando combinar los grandes paradigmas educativos con estrategias gerenciales optimas.
La educación debe ir en crecimiento e innovación junto a su población, un país o estado no pude darse el lujo de que su educación desmejore la calidad a costa de que sus estudiantes vayan un paso por debajo de cómo van los grandes cambios en el mundo, es aquí donde los controles del estado deben jugar un papel preponderante. Con este mundo globalizado en el que vivimos hoy en día, mucho más aun se requieren personas mejor capacitadas que hagan posible su crecimiento personal traducido en muchos casos en una mejora de la calidad de vida.
Ahora, no basta con crecer en cuanto a teorías también hay que adaptarse a los cambios tecnológicos que indefectiblemente conllevan a un costo económico, otro punto más de encuentro entre economía y educación. Hoy por hoy los recursos son extensos desde el computador con internet hasta programas que apoyan el proceso educativo según las necesidades de lo que se está aprendiendo, la gama de recursos y herramientas son muy extensas pero conlleva a un costo expresado en dinero.
Si nos referimos a la política, que es una ciencia vinculada en muchos casos a los sentimientos de la gente y en la que han nacido en la historia de la humanidad grandes líderes, para bien o para mal apoyados en el carisma que puedan poseer, o algunos otros con un proyecto definido y bien estructurado. Influye mucho en este aspecto la cultura de la población expresado en valores y/o anti-valores que pueden de una u otra forma modificar para bien el criterio de un ciudadano, hoy en día los países desarrollados tienen muchas más oportunidades de ejecutar proyectos ambiciosos que los países en vías de desarrollo donde las condiciones económicas, sociales y culturales pasan a ser piedras de tranca para poder tener una real educación de calidad.
La economía, ciencia que va de la mano con el aspecto social y que rige de una u otra forma los destinos de las sociedades, de los pueblos. Un estado con una economía deprimida será cada vez más pobre tanto en recurso humano como en bienes materiales expresado en mayores oportunidades tanto en educación, cultura salud o deporte por mencionar algunas.
Tocando el fondo de la interrogante si hablamos de política y educación veremos que desde el punto de vista jurídico según sea la clase política reinante, se van a elaborar las normas o leyes bajo las cuales debe regirse la educación de una región o de un país, además va a depender mucho de la óptica de los políticos de turno quienes han podido anteponer en muchos casos hasta los intereses del colectivo por encima de los de la sociedad, hemos visto gobiernos a los que poco les interesan una sociedad culta y/o educada gracias a que de esta forma son más moldeables hacia sus fines particulares.
Pero además tocando lo económico es esa misma clase política dominante quien administra y maneja los recursos destinados para la educación en este caso, siendo manejados en muchos casos sin los criterios adecuados por haber intereses particulares o grupales en el medio, en muchos casos y en países como el nuestro la corrupción que ha hecho estragos en su sociedad y por consiguiente en su cultura y nivel educativo.
Es posible que un proyecto de educación que sea viable no pueda llevarse a cabo por razones estrictamente políticas y a su vez ser relegado por proyectos educativos de menor calidad, la educación como ciencia exige renovación, esta renovación debe ir de la mano con los contantes cambios que exige la sociedad. Nuevas teorías se van desarrollando, nuevos paradigmas se inventan otros ya existentes se reestructuran pero eso es la educación como la sociedad cambiante, mal podría la educación quedarse estática ante los cambios que las realidades le van exigiendo.
Por otro lado el aspecto económico toca a la educación de varias formas, un aspecto es el colectivo con el apoyo del estado lograr implementar políticas educativas que sean accesibles al grueso de la población pero sin desmejorar la calidad del hecho educativo, he ahí un dilema en lo colectivo ¿masificación contra calidad? Ambas pueden coexistir sin necesidad de que alguna destruya a la otra.
En el aspecto particular para todos es sabido que la educación conlleva a un costo y en los países o culturas en las que el estado poco o nada aboga por una educación pública de calidad es la persona o representantes quienes deben costear los gastos que el proceso de enseñanza aprendizaje lleva consigo.
Así que para concluir no nos resta más que decir que entre política economía y educación hay relaciones históricas de fondo y de forma que van a perdurar en el tiempo porque además de las claras influencias que la política y la economía ejercen sobre la educación tenemos lo que el hecho educativo ejerce a su vez sobre ellas.
Teniendo poblaciones mejor educadas más cultas se podrán seleccionar las políticas del estado con más y mejores criterios, de forma más asertiva que haciéndolas desde la ignorancia. Las probabilidades de éxito son mucho más amplias.
Teniendo una población más educada se puede lograr una economía mas prospera por cuanto se pueden manejar los recursos de manera más austera y efectiva.


Emigdio Castillo Aponte, Febrero 2010

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