sábado, 3 de diciembre de 2011

La Sinceridad



A pesar de que podemos sonar hirientes o corramos el riesgo de ser tachados, en un momento determinado como aves de mal agüero, es importante ser sincero; decir la verdad para bien o para mal. La mentira o la omisión de la verdad, puede generar una falsa paz; una paz hipócrita. Sólo basta tener tacto para decir esa verdad sin herir, o hiriendo lo menos posible. Colocarle unos toques de edulcorante a esa verdad la hará digerible.

Ahora bien, ¿Qué pasa si callamos? ¿Qué ocurre si por querer estar bien con todos omitimos la verdad? Guardamos silencio o peor aún, mentimos. Esto nos puede colocar en un estado de bienestar falso, ante las personas a quienes les mentimos. Pero una mentira lleva a otra y a otra, es decir; podemos caer en un círculo de mentiras que nos pueden colocar en serios aprietos.

Existe incluso el estado patológico de la mentira, que es la mitomanía. Nada más sano para nosotros y para quienes nos rodean que ser sincero, las personas sinceras son, excelentes consejeras. Si buscas un consejo, quieres que te lo dé alguien sincero ¿verdad?, no buscas a un embustero para que te dé el consejo.

Hay además el otro extremo, las personas que son en exceso sinceras, que te dicen desde que el peinado o la camisa no te quedan bien, estos pueden rayar en la impertinencia o en la falta de respeto. Así que el secreto es decir la verdad, pero saber decirla, como para todo en la vida, el equilibrio es el que marca la diferencia.

Recordemos al filósofo, político, orador y escritor romano Lucio Aneo Séneca, cuando expreso lo siguiente: “Prefiero molestar con la verdad que complacer con adulaciones”. Di la verdad sé sincero pero no olvides: Endúlzala.

Hasta una próxima entrega, para comentarios y sugerencias al correo electrónico emigdiocastillo@gmail.com, pueden seguirnos por el Twitter @EmigdioCA y leer nuestras reflexiones en emigdiocastillo.blogspot.com y recuerden que, como alimentamos nuestro cuerpo físico debemos alimentar nuestra alma, muchas gracias.



sábado, 8 de octubre de 2011







Apego y Desapego




Saludos y bienvenidos a nuestra sección. En el día de hoy vamos a hablar del apego y el desapego.
Hablar del desapego no es nada nuevo, desde los apóstoles hasta los expertos analistas de la conducta humana en nuestros días han comentado de manera insistente sobre este tema.
Según Lucas 18,22, Jesús dijo: “Vende todo lo que tienes, reparte el dinero entre los pobres y tendrás un tesoro en el cielo”, nada mas claro que este mensaje para entender el concepto del hijo de Dios sobre los bienes materiales, de aquí podríamos escribir una reflexión solo para este tema.
Pero el apego va más allá, hay apego a los bienes materiales, a las personas, al poder, a las costumbres y a muchas otras cosas, circunstancias o situaciones (por ejemplo a la juventud).
Con respecto a la juventud muchas personas hacen hasta lo imposible incluso derrochan altas sumas de dinero para mantener una “juventud artificial” esto mediante cirugías y técnicas novedosas pero arriesgadas de nuestra medicina moderna. Por otra parte hay gobernantes que se aferran de manera obsesiva a cargos en organismos públicos o privados, llegando a cometer hasta actos ilícitos, zancadillas a compañeros y muchos otros actos negativos con el fin de mantener su cuota de poder.
Quien sale de su país necesita sus comidas, su música, pudiendo caer hasta en estados depresivos.
Sobre el apego a las personas hay parejas, padres, hijos, hermanos, familiares o amigos que se resisten a dejar vivir en paz al otro ser humano, con respecto a esto podemos decir que el creador nos dotó del “libre albedrio” que es la capacidad de la persona para escoger, cuando, donde, con quien y como vivir, ahora, si Dios nos los concedió, ¿quien puede arrebatárnoslo? Somos dueños de nuestras propias decisiones, nadie debe tomarlas por nosotros.
Ahora con respecto a los bienes materiales nos gustaría extendernos un poco más, tema bien complejo este, la verdad sea dicha es muy gratificante poseer una cómoda posición económica, muchas veces es imprescindible, para comer, vestirnos, desde una buena cama que nos de un mejor descanso hasta unas relajantes vacaciones, medicinas que pueden alargar y darnos una mejor calidad de vida, todo eso esta estrechamente ligado al dinero.
Ahora, la reflexión sobre este tema tiene que ver con la parte oscura, con la parte negativa.
Vemos personas tan apegadas a lo material que dejan pasar la oportunidad de su vida, de hacer o desarrollarse profesionalmente en algo para lo que tienen una verdadera vocación pero se van por otra profesión, que no les gusta, por mas dinero, hay familias destruidas por el hambre de poseer bienes y fortuna, damas serias que se venden al hombre mas poseedor “al mejor postor”, incluso dejando pasar el amor de su vida, porque su amor no posee fortunas, así como estos casos podríamos citar miles.
Nuestra humilde opinión es que debemos hacer lo que nos guste, no importa que nos parezca menos rentable, el dinero llega solo, a fin de cuentas solo es un complemento, el dinero es un medio y no un fin en si mismo, debemos amar a quien amemos y que nos ame, vivir donde debamos vivir agradeciendo cada nuevo día, cada nueva oportunidad, dejemos volar el alma de la persona que quiera irse.
Vivamos mas para nosotros, para llenar nuestra alma, nuestro corazón, si perdemos una casa, un vehículo, un amor, un empleo sabiendo que lo hicimos bien y que luchamos por lo que queríamos pero al final se perdió, que así sea. La vejez llega, los años pasan vivámosla con dignidad, aceptemos la voluntad de Dios, tengamos la resignación y coraje para esperar la nueva oportunidad que de seguro llegara, haciendo lo que hagamos el amor, la familia, el trabajo, los amigos.
Lo que es para nosotros estará allí a nuestra mano, lo que no, nos será arisco, evasivo, difícil o imposible, a fin de cuentas, nacimos desnudos y no nos llevaremos nada de este mundo.

Hasta una próxima entrega, para comentarios y sugerencias al correo electrónico emigdiocastillo@gmail.com, pueden seguirnos por el Twitter @EmigdioCA y leer nuestras reflexiones en emigdiocastillo.blogspot.com y recuerden que, como alimentamos nuestro cuerpo físico debemos alimentar nuestra alma, muchas gracias.



jueves, 14 de julio de 2011

Amor y Control


Saludos y bienvenidos a nuestra sección. En el día de hoy vamos a escuchar un tema musical, que se centra en la familia como la célula fundamental para la resolución de los problemas que afrontamos y como medio y vía, para afianzar los valores.

Vamos a escuchar el tema ya la final lo discutimos.

Amor y Control – Rubén Blades.

Saliendo del hospital después de ver a mi mamá, luchando contra un cáncer que no se puede curar

Vi pasar a una familia al frente iba un señor de edad, una doña, dos muchachas y varias personas más De la mano del señor un hombre joven caminaba, cabizbajo y luciendo arrepentido, él era la causa de una discusión familiar de la que nos enteramos al oír al señor gritar

Aunque tú seas un ladrón y aunque no tienes razón, yo tengo la obligación de socorrerte y por más drogas que uses y por más que nos abuses la familia y yo tenemos que atenderte. Oh oh oh, oh oh ooooh oh oooh!

Sólo quien tiene hijos entiende que el deber de un padre no acaba jamás, que el amor de padre y madre no se cansa de entregar Que deseamos para ustedes lo que nunca hemos tenido que a pesar de los problemas familia es familia y cariño es cariño. Oh oh oh, oh oh ooooh oh oooh! Los vi marcharse con su llanto, su laberinto aun enfrentando en la buena y en la mala juntos caminando y pensé mucho en mi familia los quise tanto aquel momento que sentí que me ahogaba el sentimiento Aquel muchacho, y mi pobre madre dos personas distintas, pero dos tragedias iguales. Cuanto control y cuanto amor tiene que haber en una casa, mucho control y mucho amor para enfrentar a la desgracia. Por más discusiones que haya dentro de tu casa y sientas que ese cariño es causa perdida, ten la seguridad de que ellos te quieren y que ese cariño dura toda la vida Cuanto control y cuanto amor tiene que haber en una casa, mucho control y mucho amor para enfrentar a la desgracia. Mantén amor y con gracia enfrenta la pena, combinando la esperanza y el sentimiento dando la espalda no se van los problemas, ni la impaciencia resuelve los sufrimientos. Cuanto control y cuanto amor tiene que haber en una casa, mucho control y mucho amor para enfrentar a la desgracia. Amor y control amor y control amor y control amor y control

Fíjense como, prestando atención a esta letra, yo los invito a que la escuchemos dos, tres o cuatro veces, y escuchemos una letra que llega al alma, y practiquemos lo que dice Rubén Blades en ese tema, practiquemos el amor y el control y nunca dejemos que ninguno de nuestros familiares afronte problemas solo, estemos siempre a su lado.

Hasta una próxima entrega, para comentarios y sugerencias al correo electrónico emigdiocastillo@gmail.com, pueden seguirnos por el Twitter @EmigdioCA y leer nuestras reflexiones en emigdiocastillo.blogspot.com y recuerden que, como alimentamos nuestro cuerpo físico debemos alimentar nuestra alma, muchas gracias.






sábado, 25 de junio de 2011

"Minutos para el Alma" El Perdón




A la mayoría de las personas se nos hace difícil perdonar, claro! no es tarea fácil, pero tampoco, imposible.
Perdonar, las faltas cometidas hacia nosotros, por personas que queremos y que nos han herido en situaciones y momentos determinados es un ejercicio que debemos realizar para nuestro bienestar.
En nuestra sección de hoy, abordaremos el perdón como la excelente herramienta de sanación espiritual que es.
No hay mejor elixir para el alma que perdonar, perdonar nos hace nobles, bondadosos y amorosos. El perdón es en si mismo una medicina.
Constantemente nos topamos con personas: familiares y amigos o nosotros mismos por qué no? Que se encuentran en un estado de infelicidad total, en completa apatía, sin deseos de vivir, son auténticos robots humanos, actúan de forma automática y siempre, siempre están a la defensiva. Es posible que ese ser querido arrastre un perdón "pendiente".
Los perdones pendientes son como las tareas que dejamos de hacer, las deudas que no pagamos, nos preocupan, molestan y perturban la existencia hasta el punto de colocar en peligro nuestra salud física o psicológica.
Para perdonar no es imprescindible que la persona que nos ofendió nos pida perdón, es lo bonito, podemos hacerlo por decisión propia, madura e independiente, decidimos perdonarla en un acto de amor, porque le demostramos que le queremos.
Se imaginan un resentimiento con nuestra madre, con nuestro padre o nuestros hermanos? Eso sólo nos traería intranquilidad y dolor. Hay perdones pendientes que agobian.
En la medida en que perdonemos nos sentiremos mejor con nosotros mismos y podremos llevar una vida plena, llena de paz y amor para brindar a los que nos rodean.
Recordemos a Martin Luther King cuando dijo que: "El que es incapaz de perdonar, es también, incapaz de amar"
Sánate! Ama, Perdona!
Nos escuchamos en una próxima entrega.
Recuerden seguirnos en twitter por @EmigdioCA, visitar nuestro blog donde pueden leer estas reflexiones y más.
Para sugerencias, nuestro correo electrónico emigdiocastillo@gmail.com
Y no olviden que como alimentamos nuestro cuerpo físico, necesitamos alimentar nuestra alma".



lunes, 20 de junio de 2011

El Silencio



En esta primera entrega, vamos a abordar un tema que me llama mucho la atención. Vamos a hablar sobre "El Silencio".

Con el silencio queremos iniciar este ciclo de reflexiones por la radio web universitaria, programa "Entre Uclaistas".

Vamos primero al concepto del silencio. ¿Qué nos dice la Real Academia Española, en su primera acepción?: El silencio es sencillamente, la abstención de hablar, pero el silencio es más que eso, es también una forma de comunicación.

En una conversación de amistad, familiar o de trabajo, con un silencio, podemos aprobar o desaprobar, un silencio bien manejado, puede significar muchas cosas, de manera que aprender a guardar silencio en el momento preciso, es todo un arte, es sinónimo de sabiduría.

Cuantas veces nos ha pasado, que decimos algo en un momento de euforia y luego nos arrepentimos, tal vez herimos a una persona querida, recuerden, las palabras no se recogen.

El silencio puede ser para nosotros, un aliado o un enemigo, pero de igual manera hay silencios que hieren, como la frialdad, el desamor que puede ser expresado en la forma de indiferencia, es uno de los silencios más dolorosos.

Si nos referimos al proceso de comunicación como tal, los seres humanos dedicamos aproximadamente un 42% de nuestras vidas a escuchar y un 32% a hablar, es decir es más lo que nosotros escuchamos que lo que hablamos. Los invito a manejar estas ausencias de palabras con mucho sentido común.

Hay un silencio, que es el silencio en soledad, el silencio que nosotros muchas veces tememos, cuando estamos solos, con frecuencia nos cuesta desprendernos del televisor, de la radio.Dediquemos unos minutos al silencio absoluto, en ese silencio absoluto, podemos escuchar, desde el canto de los pájaros, hasta una sirena de ambulancia sonando muy a lo lejos y eso nos va a dar cuenta de que somos personas, inmersas en una gran urbe.

En una urbe donde una de las grandes búsquedas debe ser nuestro "yo interno", ese ser humano que nace bondadoso por naturaleza, no creo que nosotros nacemos malo, nosotros nacemos buenos, el mejor ejemplo de ello, son los niños, nosotros nacemos como niños, crecemos como niños.

La idea es que busquemos ese niño interno dentro de nosotros y lo potenciemos hacia las personas que queremos, hacia nuestros compañeros de trabajo, hacia nuestros amigos.

Así que vamos a cerrar con una frase de William Shakespeare que dice: "Oír es uno de los cinco sentidos del cuerpo, pero escuchar es un arte.

Para comentarios y sugerencias:

emigdiocastillo@gmail.com o al Twitter @EmigdioCA.

Muchas gracias.









También en la Radio


A partir de este mes de junio, gracias a Dios y a mis compañeros de la radio web universitaria: Cheo Noguera, Miriam Castro, Juan Carlos Sánchez y Mary Rodríguez, se inicia una nueva etapa en la historia de este blog; que comenzó en 2007, a partir de junio estaremos en la radio web universitaria de la UCLA y cada reflexión que escriba, será posible además escucharla por la radio y en la medida que el tiempo me lo permita la colocaré escrita y hablada por este sitio.

Cuando me propuse en 2007 comenzar a escribir en este espacio, no pretendía ni pretendo hoy, dar clases de moral ni mucho menos, soy una persona de carne y hueso como todos, humano, imperfecto y seguro que cometiendo errores, pero eso sí, rectificando, tratando de ser mejor cada dia.

Lo que me propongo con esta serie de reflexiones escritas y de ahora en adelante también habladas, es conversarles sobre temas de la vida cotidiana, temas que muchas veces nos cuestan hablar, por orgullo, vergüenza y un sinfín de causas. Muy humildemente les quiero exponer mis puntos de vista sobre aspectos como: El silencio, el perdón, la humildad, la fuerza de voluntad, el apego y desapego, el tiempo, y muchos otros.

Para mi es de vital importancia contar con sus valiosos comentarios, me gustaría saber que piensan de lo que expongo, debatan conmigo, juntos aprenderemos a ser mejores personas que es una de las grandes metas de mi vida.

Agradezco los 4 fieles seguidores y las casi 3000 visitas que posee este blog, los invito a seguirme por el Twitter @EmigdioCA o escribir a mi correo electrónico emigdiocastillo@gmail.com o emigdiocastillo@hotmail.com, les reitero, díganme que opinan para ir mejorando sobre la marcha e ir creciendo con ustedes. Pretendo además; con el visto bueno del creador, estar publicando en alguno de los diarios de circulación regional en una fecha cercana. Recuerden, los sueños se cumplen.

Pueden escucharnos cada jueves a las 10:30am en el programa “Entre Uclaistas” por la www.ucla.edu.ve/radio de igual manera los invito a sintonizar todos y cada uno de los excelentes programas de la emisora y la excelente música que el equipo de trabajo prepara para ustedes con mucha mistica.

A todos, mi eterna gratitud por tomarse la molestia de dedicar junto conmigo unos minutos para nuestra alma.

Les aprecia.

Emigdio Castillo Aponte.

domingo, 12 de junio de 2011




¿De qué manera la ética de cada docente define su práctica educativa?


En mi adolescencia tuve el privilegio de pertenecer al equipo de pesistas olímpicos de mi Estado a quien represente en muchas oportunidades, conté con un entrenador muy destacado, que había pertenecido a la selección nacional, logrando algunas preseas en campeonatos internacionales, él era un hombre amigable, sencillo, exigente, nos trataba como sus hijos, y todos sus atletas incluyéndome le teníamos en gran estima, de hecho queríamos imitar sus hazañas y logros, a pesar de su edad (cercana a los 50 años) y que nunca le observé entrenar, en varías oportunidades le vi tomar la pesa con más de 150 kg y levantarla magistralmente, demostrándonos la técnica adecuada y alentándonos a superarlo.

En una oportunidad mientras caminaba por la cuadra de mi barrio, me encontré con mi entrenador en las puertas de un bar, en una mano tenía una botella de cerveza y en la otra un cigarrillo, nunca hasta ese momento le había visto así, a mi mente vinieron también sus consejos de mantenernos lejos de los vicios, “si deseas ser un destacado deportista no debes fumar ni beber” eran sus palabras.

Mi entrenador debe haber percibido mi consternación, porque sin mediar otra palabra, de sus labios con aliento a cerveza y cigarrillo, emanó la siguiente declaración: “Haz lo que yo te digo, pero no lo que yo hago”, para un adolescente de 15 años era difícil asimilar todo aquello, yo quería ser como mi entrenador, consiente o inconscientemente imitaba su expresiones, imitaba su forma de hablar, imitaba su forma de caminar (de un verdadero pesista creía yo) de lunes a viernes desde los 13 años de edad, tenía al gimnasio como mi segunda casa, cuatro horas de entrenamiento y en vacaciones entrenaba doble, pasaba más tiempo con el entrenador que con mi padre, de hecho tenía un mejor nivel de comunicación con él que con mis padres.

Ahora observo hacia atrás y puedo mirar retrospectivamente y llegar a las siguientes conclusiones:

1. Como formadores, educadores o entrenadores, nuestra influencia no se limita solo a lo que podemos decir, expresar, alentar con nuestras palabras, nuestra influencia va más allá de nuestras palabras y muchas veces desconocemos su alcance o efecto en la vida de muchos.

2. Tienen mayor efecto sobre la vida del educando o de la persona que estamos formando, lo que hacemos, nuestros actos, nuestra forma de vivir, que todo el cumulo de palabras expresadas.

3. Debemos de ser consecuentes con lo que decimos, nuestro predicar debe estar acompañado de nuestro accionar, A la edad de 17 años asistí a una charla de salud en mi ciudad y durante dos horas el exponente se esforzó por dar a conocer el daño que producen algunos alimentos refinados y de manera especial el uso de las gaseosas (Pepsi Cola, Coca cola y otros) y su efecto en nuestro organismo, salí de allí convencido de mejorar mis hábitos alimenticios; semanas más tarde me encontré al exponente en una tienda, él no me conocía, ni siquiera sabía que yo había participado de su ponencia, lo vi tomar un refresco (Coca cola) y calmar su “sed”, Lamentablemente no vivía lo que enseñaba. Ahora, ¿cómo podía creer en sus enseñanzas? Él mismo no lo creía, no las practicaba, y no era un mal exponente ya que movió a un joven de 17 años a cambiar sus hábitos en cuanto a la alimentación, ciertamente no enseñaba una mentira, era real lo que enseñó, pero, que triste situación enseñar algo que tú no vives.

4. En la enseñanza no podemos desligar lo que somos de lo que enseñamos, porque realmente enseñamos lo que somos, mi entrenador se esforzó para que su manera de vivir no afectara a sus atletas, pero lamentablemente no fue así, la mayoría de los atletas incluyéndome al concluir una competencia, consumíamos cerveza, porque nuestro entrenador era nuestro máximo ejemplo. No valieron tanto sus palabras, sino su ejemplo.

5. Enseñar no solo es cuestión de “técnicas pedagógicas, adquiridas memorísticamente o mecánicamente y aplicadas esquemáticamente”, la enseñanza va más allá de su teoría y técnica, “Haz lo que yo te digo” la enseñanza es una actividad integral. No está desvinculada de la vida del Maestro.

6. Alguien expresó que el mejor camino de la enseñanza es la del ejemplo: “Ejemplo os he dado para que como yo he hecho ustedes también lo hagan”. El maestro no delinquiendo, no formará delincuentes. “Las palabras mueven pero los ejemplos arrastran”.

El docente es un creador, y de acuerdo a la ética que refleje cada docente será el resultado en su práctica educativa.


Colaboración de:

Pr. Ney Devis
Director Servicios Estudiantiles
Instituto Universitario Adventista de Venezuela
58-4166513258
devisney@gmail.com
http://devisney.jimdo.com/
www.facebook.com/devisney
@devisney

lunes, 30 de mayo de 2011

Decisiones


La vida está llena de decisiones, unas pequeñas; otras trascendentales, pero siempre decisiones al fin.

En el supermercado, ¿qué marca de jabón, de cereal?.. Decidimos… Y en la casa; ¿pintura blanca o azul?… Decidimos…

Ahora bien, hay decisiones que marcan nuestra vida para siempre, ¿nos bautizamos?, ¿nos casamos?, ¿tenemos hijos?… Decidimos.. Para bien o para mal, hay que decidir, no podemos ir por la vida como seres sin rumbo. ¿Tomamos la dirección? ¿Derecha o izquierda?, ahora mismo decides si ¿leer esto o no?

De eso se compone nuestra vida, de decisiones, debemos tener tino para tomar las decisiones acertadas, escoger el camino correcto, ¿cual será? No podemos detenernos a pensar, en muchas ocasiones nos toca tomar decisiones apresuradas, que pueden costarnos caro, hasta la vida.

Pero hay que decidir, hay que arriesgarse. La madurez, es una gran aliada; nos ayuda a tomar decisiones y a acertar en ellas, ¿por qué? sencillamente porque tropezamos y aprendimos, así que hasta para decidir, las cosas más sencillas de la vida hay que tener sabiduría, temple, coraje.

Decidan, eso si, cuando se equivoquen admítanlo, sean honestos consigo mismos, eso los ayudará hacia las decisiones del futuro, tomamos una marca de jabón, salió mala, no la compres más, en esencia de eso se nutre nuestra capacidad de decisión.

Por mi parte, he tomado las decisiones grandes, de igual manera tomo a diario las pequeñas, en los momentos requeridos, unas acertadas otras no, pero he decidido. ¿Tú decides?

Emigdio Castillo Aponte

viernes, 20 de mayo de 2011

La autodestrucción ¿Mecanismo de defensa?


Ante tal interrogante me gustaría realizar algunas consideraciones:

A mi juicio, hay personas que para evadir situaciones desfavorables, desastrosas, como: la baja autoestima, la pérdida de un ser querido, la insatisfacción amorosa o hasta conflictos familiares no resueltos, pueden caer en un estado de hastío y de depresión tal que deciden suicidarse.
Ese suicidio no es como lo conocemos, de forma "tradicional", esa manera de irse de este mundo puede ser lenta e inconsciente, pero eso si, sin pausa ni demora.

¿Cómo actúa? La persona adopta una serie de conductas autodestructivas que más temprano que tarde lo llevarán a la muerte. El alcoholismo, uno de los más comunes y aplicados, el cigarrillo, las drogas ilícitas, manejadas como una peligrosa válvula de escape. De igual manera la comida, comiendo en exceso, destruyen su cuerpo, lentamente, es una forma segura de suicidio, quizá adoptando comportamientos peligrosos, que pongan en riesgo su integridad física, la anorexia, dejando de comer también se destruye nuestro cuerpo.

Generalmente vemos personas que convierten su vida en una autentica bomba de tiempo, con un solo y genuino fin, acabar con su vida, esa vida que les cansa, desaparecer esos problemas que lo agobian, esos sentimientos que les persiguen. El mal manejo de situaciones adversas puede llevar a la persona a adoptar alguna o varias de estas conductas, que representarán al corto plazo su propia destrucción.
El remedio eficaz para estas conductas, es el perdón, a quienes nos hicieron daño o a nosotros mismos según sea el caso, la autoaceptación, bajo el entendido de que somos seres humanos, que cometemos errores, pero que siempre podemos y debemos mejorar. Tenemos un destino marcado, tal y como nacemos hay un Dios que decide cuando nos vamos, por mucho que lo intentemos, no será antes de lo que indique nuestra fecha de caducidad.

¿Tienes tú, o alguno de tus seres queridos alguna de estas conductas?

He ahí la solución. Acéptate, tal y como eres.

Emigdio Castillo Aponte.

martes, 3 de mayo de 2011

El otro tú, el otro yo


El otro tú, el otro yo


Cuando estamos solos poseemos la necesidad de encontrarnos con nosotros mismos, para conversar con nuestro yo interno, ¿cuantas veces no has huido a esa soledad individual? Le huimos porque sabemos que ese "yo" que nos va a acompañar estando solos, es quien conoce nuestros secretos más íntimos, el que nos dice las verdades que no queremos escuchar, que aun a sabiendas de que tiene la razón, no queremos admitirlo.
Ha llegado el momento, para estar solos con nosotros mismos debemos poner en "off" todos los “jugueticos” que forman parte de nuestra vida diaria y nos distraen de ese encuentro con nuestro verdadero ser, el televisor, la radio, el computador, todos absolutamente todos deben estar apagados, cerremos los ojos un momento, sólo un momento, tratemos de centrarnos en el sonido de los arboles meciéndose con la brisa, en el canto de las aves silvestres que se confunden con el ruido de cornetas de vehículos y sirenas de ambulancias muy a lo lejos, en esa urbe a la que pertenecemos sin haber tenido mucha posibilidad de elegirlo.
Estamos solos con nosotros, hay un silencio que aturde, evocamos momentos, aquella señora que necesitaba cruzar la avenida pero íbamos de prisa y no pudimos ayudarla, nos dijimos, ella estará bien, otro la ayudará, el niño en el semáforo limpiando los vidrios, ¿será hijo de quién preguntamos? ¿Cómo un padre deja a su hijo así?, Menos mal que los nuestros están resguardados, pensamos; sin tomar en cuenta que, "quien tiene un hijo tiene todos los hijos del mundo", como sentenció el gran Andrés Eloy Blanco en "Los hijos infinitos".
El otro "tú" el otro "yo", pregunta, ¿Has obrado bien? ¿Eres bueno? ¿Que persigues en esta vida? ¡nos aterroriza! necesitamos trabajar, escuchar música, ver un programa en la TV que nos espante a ese "yo" fastidioso, siempre preguntando cosas raras, a fin de cuentas, afortunadamente para nosotros, aparece pocas veces, para tu alivio, hay muchas distracciones que te alejan de ese "tú criticón".
Mi consejo, humilde, honesto, acércate a ese otro "tu", escúchalo, él es más sabio que tu, tiene mucho tiempo para reflexionar, no vive apurado como tú, él siempre tiene tiempo para los demás, es bueno, sincero y te quiere. Ese otro tú es tu conciencia. Apóyalo, entiéndelo, déjate aconsejar por él.



Emigdio Castillo Aponte

miércoles, 9 de febrero de 2011

El Barquisimeto que he conocido, he visto y me han contado (I)

Quiero ocupar estas líneas en mi querido Barquisimeto, el pueblo de mis amores, en el que he crecido y al que debo lo que tengo y lo que soy. La gran parte de lo que relataré a continuación, lo vi, y viví, alguna otra me la contaron, no porque no haya querido vivirla, sólo que mi edad en años, no llega hasta algunas de las referencias, me excuso si me falla la memoria con respecto a sitios fechas o nombres.


A mediados de los años 70, hasta donde me da la memoria, en cuanto a gastronomía, la gente podía deleitarse con una rica chicha, hecha de puro arroz en la carrera 18 con calle 40 (un señor en un carrito verde claro), o quizás disfrutar de la mejor tizana en mi juguito en la Vargas con 17. Si la intención era comer hamburguesas, nada como el palacio de las Hamburguesas (Todavía existe allí) Vargas entre 22 y 23.

Otro de los lugares preferido por los jóvenes era la fuente de soda del automercado CADA en la 28 entre 19 y 20, más adelante la Nova 74 ocuparía ese sitial y el CC Los Leones se perfila como un excelente punto de referencia. Toda una referencia en los 80’s y parte de los 90’s el Tropiburguer en la Avenida Los Leones en el local donde hoy funciona Wendy’s.

Los primeros “Pepitos” uno de los Barquisimetanos más comidos a nivel nacional, nacen en un sitio conocido como “El Matador”, ubicado en la hoy Av. Herman Garmendia, al lado de la antigua Manga de coleo, luego nace la primera calle del Hambre en la Prolongación de la Av. Los Leones donde el “Gordo Toño” vende los primeros pepitos pero de Lomito, toda una sensación.

El barquisimetano cinéfilo de esos tiempos era capaz de disfrutar de una buena película en el Cine Imperio Calle 41 con Carrera 19, o en el Cine Bella Vista 20 con 39 y 40, luego el Florida en la Calle 31 con Carrera 19. El cine Crisser en la Avenida Lara, en el CC con el mismo nombre. Luego en los 80s aparecen hacia el centro-oeste los Cines Canaima y Obelisco con su centro comercial cada uno, mención aparte para el cine auto, en la hoy Urb. El Pedregal.


Si de compras se tratara, nada como ir a la Avenida 20 un ícono de la ciudad y referencia de orden comercial a nivel nacional. La primera gran tienda por departamentos de la ciudad, lo fue Beco, Beco Blohm (por el nombre de sus dueños) o Centro Beco como se le conocía, alguna vez me contaron que había un famoso dicho, que rezaba: “Esa puerta es más segura que el portón de Beco”, haciendo referencia a que en este sitio fue colocada la primera puerta de santamaria de la ciudad, muy segura por lo demás.

Sears en el Centro Comercial Arca, comercializaba desde ropa hasta electrodomésticos en un tiempo en el que el poder adquisitivo del venezolano andaba en muy buen estado, (Hoy funciona allí Grafitti, antes se llamó Maxy’s). Materiales Mendoza en la Vargas con 19 y 20, hoy Multicentro Capital Plaza, un gran centro ferretero y en cuya esquina recuerdo, una tarima muy pequeña y la “Pequeña Mavare” dando su tradicional concierto a la Divina Pastora.

En la 20 con 25 y 26 estaba “Fin de Siglo”, (era todo un espectáculo deleitarse una merengada o un helado en la heladería de al lado) hoy “Nuevo Siglo” diagonal al C.C ARCA, a media cuadra estaba el “Pasaje Siglo XX”, Mención aparte merece el Mercado de El Manteco, que comenzó como un centro bodeguero y años más tarde evolucionó en lo que es hoy MERCABAR, que llegó en un momento a ser distribuidor de un gran porcentaje de las hortalizas que se consumían en Venezuela.

Infaltable recordar los mercados Bella Vista y Terepaima en sus épocas de oro. De las farmacias de tiempos atrás, “Altamira” 18 con 36, la “Miranda” en la 20 con 28 y tiempo después la “Farmacia La Floresta”, que si mi memoria no me falla luego se convirtió en el primer “Farmatodo” del país.

De las procesiones de la Divina Pastora, llegan a mi mente imágenes de un Santa Rosa muy pueblo, en las procesiones más antiguas que recuerdo, no existía la prolongación de la Av. Venezuela, por eso la imagen de la virgen era llevada por la Av. 20 hasta la Vargas y allí tomaba la Venezuela.

Sé que debo haber obviado muchas cosas, pero en esencia expongo los que quise contar sobre todo a las generaciones de jóvenes que poco o nada de lo relkatado vivieron. En la gran ciudad de hoy, tenemos varios Mac Donalds, Burguer King, o Wendys, hay grandes “Malls” como Las Trinitarias, El Sambil o El Metropolis, centros ferreteros como EPA, Todo para El Herrero o LCC.

A mi parecer se ha perdido un tanto, el calor de ese pueblo de antaño. Con estas líneas me he quedado corto y tendremos una segunda edición de este relato.

Grandes cines, grandes restaurantes. Barquisimeto es hoy La Barquisimeto, (ciudad) y no el Barquisimeto, (pueblo) que yo conocí, siempre de la mano de la mejor guía turística que pude tener, mi madre; María, la mejor de las madres, a ella le dedico estas líneas.

Luego, les sigo contado..